Las pequeñas y medianas empresas mostraron una mejor opinión respecto a la evolución de la actividad industrial.
La confianza de las pequeñas y medianas empresas mejoró a fin de 2022. En diciembre fue de un 0,8% mensual, recuperando la caída que había registrado en noviembre. El aumento se explica por la mejor situación de la industria pyme, que impulsada por mayores pedidos de producción, mejoró 2,2% su confianza.
El dato surge del Índice de Confianza Pyme (ICPyme) que elabora la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) para captar el ánimo del empresario en base a tres variables: la situación presente de su empresa, sus expectativas de evolución futura y sus intenciones de inversión.
El informe muestra, además, que las pymes trabajaron en diciembre con niveles de confianza de 61,3 puntos, teniendo como referencia una escala de 0 a 100 (en la que 0 es confianza nula y 100 confianza plena). Es decir, la brecha con nivel de confianza plena, es de 38,7%.
El principal elemento que impulsó la mejora en la confianza pyme de diciembre fueron las expectativas de evolución futuras de las industrias, que subieron 4,0%, aunque recuperando solo una parte de la caída de 11% que había registrado en noviembre. También el comercio mejoró su confianza sobre la situación esperada a futuro, pero más modestamente (+0,6%). De todos modos, el nivel de las expectativas del comercio continúa siendo 17% superior a los industriales.
