La desinfección implica el uso de un desinfectante, pero los productos de alto nivel de desinfección compuestos no adecuados para una limpieza general. Dentro de los agentes químicos usados para desinfección, hay antisépticos, que evitan la descomposición o putrefacción, al controlar el crecimiento de microbios, son germicidas de baja toxicidad, se pueden usar sobre la piel, y desinfectantes, de mayor toxicidad y que se emplean sobre los objetos, ambiente y superficies inanimadas. Se puede decir que las medidas de asepsia y antisepsia podrían ser eficaces separadamente en la lucha contra la infección, pero es imprescindible tener en cuenta que su utilización de una forma complementaria resulta totalmente necesaria si se quiere alcanzar el éxito de las actuaciones. Los desinfectantes pueden tener diferentes acciones: bactericida, que matan bacterias, pero generalmente no matan a las esporas; bacteriostática, que evita la reproducción y crecimiento de las bacterias, pero no las matan; fungicida: matan hongos, mohos y levaduras, aunque no maten las esporas; fungistática, que evitan la reproducción y crecimiento de hongos, mohos y levaduras, pero no los matan, y virucida, que destruyen virus, pero no esporas. Los desinfectantes químicos de uso más corriente son los aldehídos, que tienen un gran poder de destrucción de bacterias, hongos microscópicos y virus; el amonio cuaternario que tienen alguna acción de detergente y son buenos desinfectantes, pero algunos son inactivos en presencia de jabón y su acción se reduce con la presencia de material orgánico. Además, los fenoles que son muy efectivos contra los agentes bacterianos y contra hongos y muchos virus; los compuestos de cloro que son buenos desinfectantes sobre superficies limpias, pero son rápidamente inactivados por la suciedad, son efectivo contra bacterias y muchos virus, pueden irritar la piel y son corrosivas para el metal, pero son relativamente baratos. También hay peróxidos, activos contra bacterias, esporas bacteriológicas, virus y hongos a concentraciones bastante bajas, y yodoformos, que son buenos desinfectantes, pero no funcionan bien en la presencia de material orgánico. Son efectivos contra bacterias, hongos, y muchos virus. 15 de septiembre de 2016 – ep