Los pisos de las terrazas requieren de cuidados más frecuentes que los interiores. La ventaja es que los métodos de limpieza son sencillos. Uno de los materiales más comunes en los suelos de las terrazas es el barro cocido, resistente a la suciedad y los embates del clima es perfecto para espacios exteriores. Para que luzca perfecto, una gran opción es lavarlo con agua y un poco de lejía para eliminar las manchas. Para mejorar la operación, también se puede usar una escoba para apartar ramitas y otros objetos. Luego es conveniente aplicar una cera para terrazas que ayude a proteger las baldosas de barro, evitando que la suciedad se adhiera a ellas. Los ladrillos también son un material común en el suelo de la terraza, y su limpieza profunda requiere de un poco más de trabajo para obtener buenos resultados. Si bien se puede limpiar con agua, lo mejor es mezclarla con detergente y frotar los ladrillos con una escoba. El cemento también es un material usado en estos espacio. Este tipo de suelo se limpia en base a una mezcla de agua, un poco de vinagre, una tapa de detergente y de amoniaco. El paso siguiente consiste en esparcirlo en el suelo con una escoba de cerdas resistentes. Si además se quiere dejar las barandas y pasamanos impecables, una buena opción es eliminar la suciedad con un paño húmedo, pasar un poco de petróleo sobre ellas y después un paño seco, verás como lucen perfectas.