FRIO, PERO ESTERILIZADO

Los nuevos materiales y métodos utilizados en el ámbito de la salud ampliaron el espectro de productos utilizados para la esterilización a bajas temperaturas.

Aunque una gran mayoría de los dispositivos médicos y quirúrgicos son resistentes al calor, desde los años cincuenta ha habido una tendencia creciente a utilizar dispositivos fabricados con materiales sensibles al calor, lo que ha hecho necesario desarrollar tecnologías de esterilización a baja temperatura.
La elección de un método u otro de esterilización no es arbitraria, sino que el fabricante debe especificar en ficha técnica si un determinado material es o no reprocesable, así como el método y las condiciones para el correcto reprocesamiento.
La esterilización por vapor es el método que presenta el mayor margen de seguridad por su fiabilidad, consistencia y letalidad. El vapor destruye los microorganismos por coagulación irreversible y desnaturalización de las enzimas y proteínas estructurales. El principio básico de la esterilización en autoclaves de vapor es la exposición del material a la temperatura requerida a una presión determinada durante un tiempo especificado.
Para reprocesar material crítico sensible al calor o a la humedad deben usarse métodos de esterilización a baja temperatura, que causan la muerte de los microorganismos por la acción de agentes químicos, por oxidación química, como peróxidos, ácido peracético o gas plasma de peróxido de hidrógeno, y por alquilación, como óxido de etileno o el formaldehído.
El óxido de etileno se utiliza desde los años cincuenta como agente esterilizante a baja temperatura. Tiene una excelente actividad microbiocida, gran poder de difusión y penetrabilidad, y es relativamente económico. Los rangos operativos son concentración de gas (450-1.200mg/l), temperatura entre 37-63°C, humedad relativa 40-80% y tiempo de exposición de 1-6h. Dentro de ciertas limitaciones, el aumento de la temperatura y de la concentración del gas puede reducir el tiempo de exposición necesario para lograr la esterilización.
El peróxido hidrógeno gas plasma es una tecnología que se empezó a comercializar en 1993. Su mecanismo de acción se basa en una primera fase de difusión de gas de peróxido de hidrógeno y la posterior generación en una cámara de vacío, mediante radiofrecuencia o energía de microondas, de radicales libres que son capaces de interactuar con los componentes esenciales de las células (enzimas, ácidos nucleicos) inactivando los microorganismos.
El mecanismo de acción del peróxido hidrógeno vaporizado se basa en la difusión del peróxido de hidrógeno en fase vapor seco. No precisa necesariamente de cámara de vacío.

18 de enero de 2018 – ep