MÁS PLÁSTICOS EN EL MUNDO

Los plásticos se acumulan en todo el mundo desde que China se ha negado a recibir más desechos.

Desde que China anunció el año pasado que ya no quería ser “el depósito de basura del planeta”, que recicla casi la mitad del plástico y los productos de papel del mundo, los países occidentales estuvieron tratando de buscar qué hacer cuando la prohibición entrara en vigor el pasado primero de enero.
En el Reino Unido, España, Canadá, Irlanda, Alemania y varios países europeos, no hay una respuesta. Un basural en Londres está sufriendo la acumulación de productos reciclables de plástico y ha tenido que pagar para deshacerse de una parte, mientras toneladas de basura se acumulan en ciudades portuarias como Hong Kong.
La prohibición de China ha causado un gran desajuste en el flujo de productos reciclables en todo el mundo, por lo que se busca exportar basura a países como Indonesia, India, Vietnam, Malasia, que no podrán compensar la diferencia.
Según informó www.nytimes.com/es, La primera ministra del Reino Unido, Theresa May, se comprometió a eliminar los residuos que se pueden evitar en un periodo de 25 años, para eso, instó a los supermercados a introducir pasillos libres de plásticos donde toda la comida se venda sin empaque y a granel.
La Unión Europea, por su parte, planea proponer un impuesto sobre las bolsas y empaques de plástico y ha citado la prohibición de China y la salud de los océanos entre otros motivos.
Esas medidas podrían ayudar a calmar la situación, pero por ahora Europa enfrenta pilas crecientes de material reciclable sin tener dónde ponerlas. Para los expertos la respuesta inmediata a la crisis podría ser la incineración o los rellenos sanitarios, ambos nocivos para el medioambiente.
La prohibición de China cubre las importaciones de veinticuatro tipos de desperdicios sólidos, incluyendo residuos no clasificados de papel y el tereftalato de polietileno (PET) de baja calidad que se utiliza en las botellas de plástico, como parte de un amplio esfuerzo de limpieza y una campaña en contra de la llamada yang laji o “basura extranjera”. También establece nuevos límites en los niveles de impurezas en otros reciclables.
China había procesado por lo menos la mitad de las exportaciones mundiales de desperdicios de papel, metales y plástico usado: 7,3 millones de toneladas en 2016, de acuerdo con datos de la industria. En julio, China notificó a la Organización Mundial del Comercio (OMC) que prohibiría algunas importaciones de basura, y dijo que la medida era necesaria para proteger el medioambiente y mejorar la salud pública.
“Grandes cantidades de desperdicios contaminados o incluso tóxicos se mezclan con desperdicios sólidos que podrían utilizarse como materia prima”, le escribió Pekín a la OMC. “Esto contamina gravemente el medioambiente en China”.
Los funcionarios chinos también se quejaron de que gran parte del material reciclable que recibió el país del extranjero no se había limpiado adecuadamente o estaba mezclado con materiales no reciclables.

18 de enero de 2018 – ep – Fuente: www.nytimes.com/es