Cerrará el basural de la capital de Brasil que había acumulado 50 millones de toneladas de residuos durante los 67 años en que existió.
Las autoridades de Brasil informaron que habían cerrado el vertedero Estructural, situado en la capital del país, Brasilia, y que había recogido 50 millones de toneladas de residuos en los últimos 67 años, lo que lo convertía en el más grande de Latinoamérica.
El gobernador del Distrito Federal, Rodrigo Rollemberg, anunció la apertura de un nuevo vertedero que sustituirá al anterior en el marco de un cierre que ha levantado la polémica entre los miles de «hurgadores» que trabajan en la ciudad.
«No podemos vivir con esta herida abierta en medio de la capital de nuestra nación: un vertedero donde seres humanos arriesgan sus vidas buscando una forma de subsistir de manera poco digna», dijo el gobernador durante la inauguración del nuevo basurero.
El plan de Rollemberg es emplear a los «hurgadores» en nuevos centros de selección de residuos, donde puedan separar la basura para su eficiente reciclaje a través de cintas transportadoras y en mejores condiciones, con uniformes y guantes.
Sin embargo, un gran número de recolectores han rechazado la posibilidad de trabajar para el Gobierno dado los bajos salarios que se pagan.
Desde que fue fundada, Brasilia ha crecido hasta convertirse en la cuarta metrópolis del país, con unos 2,5 millones de habitantes. A solo 20 kilómetros del Palacio de Alvorada, la residencia oficial del presidente del país, miles de recolectores se han ganado la vida durante décadas buscando latas y alambre de cobre, entre otros materiales.
8 de febrero de 2018 – ep