La limpieza será clave para mantener la buena reputación de un hotel, sobre todo en épocas de alta comunicación.
En el sector hotelero, las limpiezas generales de las habitaciones y del resto de las instalaciones es una cuestión esencial de cara a cosechar una buena reputación, ya que en los últimos años los huéspedes han multiplicado el acceso a infinidad de plataformas donde dejar sus opiniones, en especial en épocas en que aumenta la demanda. Por eso se debería confiar la limpieza a una empresa profesional.
Uno de los aspectos a los que la clientela presta más atención es el de la limpieza de las habitaciones. La primera impresión que se lleve el huésped será clave: si fuera mala, será complicado cambiarla y lo más seguro es que, o bien pida la hoja de reclamaciones, o bien escriba una crítica negativa en una página web.
Atender la limpieza de un hotel no implica sólo la higiene y desinfección de las instalaciones. Es algo que va mucho más allá. No en vano, una habitación con una limpieza deficiente transmite valores tan negativos como el descuido y el abandono.
Un hotel u hostal que pretenda mantener su categoría o mejorarla, tendrá que poner todo de su parte para reforzar su compromiso de calidad en todos los ámbitos. Hay clientes más exigentes que otros, pero no hay que olvidar que todos los detalles cuentan. Una pequeña mancha, una pizca de polvo o un insecto pueden ser razones suficientes para una queja formal. Por descontado, el aroma es un tema clave y la habitación ha de estar perfumada y no solo limpia.
Es esencial atender a todas las normas sanitarias que contempla la legislación vigente en materia de seguridad e higiene en el sector hotelero. Aparte de las habitaciones, los demás rincones comunes como el comedor, las terrazas, las salas de estar o el hall tienen que destacar por su higiene y desinfección. Usando los productos adecuados en cada tipo de suelo y superficie.
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