EL RIACHUELO, EN OBSERVACIÓN

Con un protocolo especial ante la pandemia, se iniciaron las mediciones de agua y sedimentos en la Cuenca Matanza Riachuelo.

 

La Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) comenzará una campaña de registro de mediciones de agua, la toma de muestras para monitorear el estado del agua y los sedimentos a lo largo de toda la Cuenca permitirá medir el impacto efectivo de las medidas de aislamiento social obligatorio en el marco de la emergencia sanitaria por la pandemia de Covid 19.
La nueva campaña de monitoreo manual se anticipó al cronograma original y los responsables de tomar las muestras deberán seguir un protocolo para el correcto uso de los elementos de protección personal y se adoptaran medidas especiales para prevenir el contagio de Coronavirus.
Durante cuatro días se realizarán toma de muestras en 21 puntos de la Cuenca, lo que permitirá, junto a las mediciones automáticas, entre otras cosas evaluar el impacto de las medidas de aislamiento social obligatorio.
La medición de la calidad del agua superficial se realiza desde hace más de 10 años. En esta oportunidad, lo que se buscará además contrastar esos datos con los registros históricos para saber cuál ha sido el efecto de estos casi 70 días de aislamiento.
El monitoreo incluye un relevamiento del sitio al momento de la toma de muestra: contexto al momento de la toma, color, olor, estado general del sitio, pH, temperatura, turbidez, conductividad, oxígeno disuelto; presencia de metales pesados; materia orgánica disponible, compuestos nitrogenados, fósforo, microorganismos e hidrocarburos.
En forma simultánea se realizan aforos para conocer el comportamiento del agua de todos los arroyos y ríos de la Cuenca, desde sus nacientes hasta el Riachuelo. Los resultados estarán disponibles en la Base de Datos Hidrológicos de ACUMAR, con los resultados obtenidos desde 2008.

ep