Millones de pasajeros son transportados por las líneas aéreas, lo que lo hace un medio efectivo de diseminación de enfermedades transmisibles. Las posibles vías de transmisión de infección que podrían ocurrir en esos espacios se dividen en tres categorías: inhalación directa de microgotas respiratorias, partículas suspendidas transmitidas por el aire; contacto directo con sangre u otros líquidos corporales, y contacto con secreciones respiratorias, materia fecal o líquidos corporales depositados en las superficies. La principal fuente de infección para otros viajeros es una persona enferma, y la proximidad con ella es un importante factor de riesgo de infección transmitida por el aire. Una vez que esa persona abandona un sitio, se habrá retirado la mayor parte del riesgo de exposición, pero el tiempo de resistencia de las partículas suspendidas en el aire puede ser mayor después de que el viajero infectado ha partido. Un caso de enfermedad transmisible se conoce en ocasiones varios días después de que la persona infectada haya viajado y pueda haber depositado patógenos sobre superficies en los aeropuertos. En los aeropuertos, se realizará una limpieza diaria. Durante los períodos de gran volumen se debe aumentar la frecuencia de la limpieza para eliminar la acumulación excesiva de desechos y restos producidos por el aumento del uso de las instalaciones, especialmente los baños. En las zonas de tránsito entre vuelos tienen una frecuencia de limpieza mayor, ya que pueden darse el caso de distintos destinos y procedencia de difícil control a las contaminaciones. Para toda esta tarea no hay que montar grandes dispositivos, basta con que el personal sea consciente de la importancia de mantener los controles de limpieza. Utilizar productos químicos antibacterianos y productos desinfectantes en los aseos y lugares de riesgo será una buena técnica preventiva diaria. Periódicamente se llevará a cabo una limpieza y desinfección a fondo de zonas de riesgo biológico. Las empresas adjudicatarias de la limpieza de los aeropuertos tendrán planificaciones con frecuencias donde se recogerán temporalizaciones para la higiene. 5 de mayo de 2016 – ep