El avance de nuevas tecnologías introduce escobas eléctricas que permiten una limpieza fácil e higiene garantizada. Las tareas de limpieza acostumbran a robar gran parte del tiempo planificado sobre nuestras agendas. En función de las labores que se deban realizar en las casas y también en las oficinas, son muchas las horas que pueden emplearse a lo largo de la semana para mantener con corrección la higiene de la vivienda. Para ahorrar energía y evitar malgastar parte de nuestro tiempo en este tipo de quehaceres, en la actualidad existen infinitos accesorios y complementos de limpieza que solventan el fregado y el barrido de suelos en un abrir y cerrar de ojos. Este tipo de herramientas, modernizadas gracias al avance de las nuevas tecnologías, pueden convertirse en una ayuda excelente para llevar a cabo, sin demasiada fatiga, las tareas de limpieza de los pisos y escaleras, entre otros sitios. Uno de los instrumentos más reivindicados en el mercado de complementos destinados a la higiene doméstica es la escoba eléctrica. Su eficaz funcionamiento mediante batería recargable permite al usuario barrer suelos, limpiar escaleras y retirar el polvo de lugares antes inaccesibles sin ningún tipo de limitación por culpa del cableado. Esta característica constituye una de sus principales ventajas, seguida por una recolección de la suciedad mucho más rápida y sencilla que la que se consigue a través del uso de aspiradoras convencionales. Además, la escoba eléctrica dispone bajo el mango de una bola giratoria, cuya flexibilidad permite que este accesorio de limpieza pueda utilizarse para retirar la suciedad que se aposenta debajo de los muebles. También puede utilizarse para pulir sofás, alfombras y cojines, retirando desde pelos de animales hasta migas de pan. NG-6 de agosto de 2015