Un avión es un tubo cerrado herméticamente, donde pasajeros y tripulantes comparten muy pocos metros, dando lugar a posibles contaminaciones cruzadas. La limpieza y desinfección de la aeronave requieren especial atención ya que es necesario utilizar agentes que no sean corrosivos o perjudiciales para los componentes de la aeronave y los encargados de la tarea deberán comprender y respetar los procedimientos que garantizarán la efectividad de los procesos, usar el equipo de protección adecuado y minimizar los riesgos. Un avión puede realizar varios vuelos en un día, dando lugar a cientos de posibles huéspedes que puedan transportar microorganismos sin saberlo, por lo que habrá que limpiar entre cada vuelo, del baño; eliminar restos entre asientos y en pasillos; cambiar protectores de apoya cabezas y limpiar y desinfectar las mesitas. Los altos costos económicos han generado servicios deficiente en este tema y muchas compañías han eliminado esta tarea de limpieza entre los vuelos cortos. A final del día, se aprovecha para una limpieza más exhaustiva, que comprenderá: el aseo del panel de control con aire comprimido y las superficies de la cabina de mando, evitando tocar o presionar botones. Además se lavarán los utensilios de alimentación, los mostradores de la cocina y las puertas de los armarios con el detergente limpiador de cocinas; también los baños; se aspirarán los pisos y tapizados de la cabina y del sector de pasajeros, y se limpiará con productos especiales no inflamables. Los asientos de cuero se limpian con un producto limpiador especiales; se vaciarán y limpiarán los compartimentos del equipaje de mano y se colocarán los cinturones de seguridad sobre los asientos. La basura se dejará fuera del avión para su retirada. Periódicamente el avión se somete a una limpieza especial por dentro y por fuera. Se tiene que aspirar y lavar todas las superficies textiles, moquetas y asientos, que se pueden desmontar para facilitar la operación. También se limpiarán a fondo paredes y mobiliario, utilizando microfibra y una solución jabonosa bacteriostática. Las bodegas serán de cuidar debido a la cantidad de paquetes y equipaje que pudieran transportar microorganismos, insectos, plagas y roedores.