Contar con una empresa de calidad y confianza para los “gim” ayudará a mantener un lugar dedicado a mejorar la salud.
Los gimnasios, dojos y box son espacios con una gran afluencia de personas, donde se suda mucho y con equipos que utiliza mucha gente a lo largo del día, por lo que resulta tan importante limpiarlos varias veces al día y, una vez cerradas las instalaciones, es recomendable llevar a cabo una limpieza más profunda, especialmente en los vestuarios y aseos.
Una de las zonas en las que más suciedad y microorganismos se acumulan son los vestuarios, por eso hay que desinfectarlos con productos específicos. También hay que prestar especial atención a los armarios, donde los usuarios del gimnasio introducen prendas sudadas y/o húmedas.
Las duchas son uno de los puntos críticos de cualquier gimnasio o instalación deportiva, porque los usuarios se duchan después de hacer deporte, de modo que se acumula una gran cantidad de suciedad y sudor, por lo cual su higiene es fundamental para evitar la proliferación de hongos y bacterias a causa de la humedad.
En cuanto a los salones, muchas de las clases dirigidas se hacen a ras de suelo, por eso, la limpieza debe consistir en un barrido inicial en seco y un posterior fregado. En las salas, muchas personas hacen uso de las máquinas y pesas a lo largo del día y para evitar la proliferación de microorganismos por la acumulación de suciedad y sudor, hay que limpiar cada una a fondo.
La limpieza en los gimnasios es imprescindible, de lo contrario, pueden darse problemas de salud en los usuarios y los empleados. Hay que mantener el ambiente limpio y fresco. Además, de este modo se alarga la vida útil tanto de las instalaciones y equipos.
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