En un audiovisual presentado en la 21º Conferencia Internacional sobre Cambio Climático (COP21) en París, la Universidad de La Plata expuso el problema de la basura electrónica. El Proyecto e-basura pudo verse a través de videoconferencia con streaming en vivo, donde se presentó el trabajo realizado con instituciones de la región; según el secretario de Relaciones Institucionales de la UNLP, Javier Díaz, impulsor del trabajo que dirige la calculista científica Viviana Ambrosi, titular de la Dirección de Medio Ambiente de esa casa, aclaró que “la participación de la Universidad en el cónclave mundial es un logro más de los tantos que el Proyecto ha alcanzado desde su inicio, en el año2009”. Ambrosi agregó que “en se mismo año, el Proyecto obtuvo el Primer Premio Inclusión Digital y contó con el apoyo de Greenpeace para presentar la Campaña sobre Residuos Electrónicos en la UNLP, en tanto que al siguiente año participó del encuentro Aportaciones del Sistema Científico al Conocimiento y Gestión Ambiental y en el II Encuentro sobre Educación Ambiental de la Asociación de Universidades Grupo Montevideo”. El proyecto fue premiado en distintas presentaciones locales e internacionales durante los años siguientes; hasta que sumó su “último eslabón hace poco tiempo con Mundo Nuevo, el Programa de Divulgación y Enseñanza de las Ciencias de la Universidad Nacional de La Plata que representó a América Latina en París hasta mediados de diciembre”, recordó Díaz. La COP21, organizada por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático fue un acontecimiento mundial con el objetivo de lograr un acuerdo internacional sobre el clima aplicable a todos los países, para reducir la emisión de gases con efecto invernadero y mantener el calentamiento global por debajo de los 2 grados Centígrados. Díaz explicó que “durante muchos años hemos efectuado campañas de donación de equipos electrónicos de todo tipo en desuso. Posteriormente, nuestros alumnos separan las partes que pueden reutilizarse, las reparan, arman nuevos equipos y los donamos a comedores barriales y a todo tipo de organizaciones de la comunidad que los necesiten”. “Además, en esos mismos comedores y organizaciones, capacitamos a los jóvenes de esos barrios para que aprendan a reparar los equipos, brindándoles un aprendizaje -al que se les torna difícil acceder debido a las necesidades individuales que sobrellevan- y contribuyendo con su inserción social a partir de sus nuevos conocimientos”, concluyó el docente. 14/01/2015 Fuente: InfoGEI